viernes, 14 de marzo de 2014

Mi amigo Tong, feliz cumpleaños.

(Canción que suena mientras escribo estas letras)
  
  A veces la vida tiene unos giros inesperados, a veces los esperamos, otras veces los soportamos pero otras sencillamente nos paralizamos y no reaccionamos a que eso de verdad pueda estar sucediendo.

  Yo tenía un amigo, un gran amigo. De esos que conoces en la secundaria, de esos con los que haces bromas pesadas, con los que te ríes, con los que te molestas, con los que dejas de hablar pero a la semana de nuevo están compartiendo y diciendo estupideces sobre alguna caricatura, sobre algún videojuego o simplemente escuchando buena música mientras encuentras alguna banda que te identifique.

  Se llamaba Javier Tong, para nosotros simplemente era "Tong", un oriundo más de aquella generación del año 1994, generación de soñadores, esa camada de mocosos llenos de creatividad y que siempre te dirán que su infancia vale oro y jamás olvidan.


  Recuerdo ese día, por allá en el año 2011. Un día bastante tedioso, teníamos que hacer una tarea, era en un módulo especial de la policía de la zona por donde resido, estábamos con otros amigos más y nos teníamos que tomar fotos para dicha tarea.

  Él era el de la izquierda, usando su suéter de manera peculiar, siendo burla para algunos pero siempre demostrando que no le importaba ni medio pepino, él estaba feliz. Ahí sale conmigo, una foto que recuerdo bastante y a pesar de yo estar bastante pasado de peso, creo que ya eso no importa, la foto, lo que significa, vale mucho, lo suficiente para quererla y conservarla siempre.

  Mi amigo Tong, ya no está. Él lo decidió así, supongo que tanto yo, como todos los que lo queríamos, los que lo apreciamos, debemos respetarlo y así será; sin embargo, sumamente complicado es el hecho de poder comprender tal decisión que nos pone a pensar que cuando recuerdes a aquel chico que estudió contigo, sencillamente ya no está, se ha apagado.

  Yo siempre he dicho, que muere en su totalidad, el ser que ha sido olvidado después de cruzar el límite de la vida. Creo que no hace falta decir entonces, que los recuerdos con mi amigo Tong estarán siempre presentes en la memoria.

  Aquellas mañanas escuchando música en su iPod, jugar juegos online en las clases de Informática. Recordaré siempre también sus caricaturas que hacía en clases, como nos dibujaba a todos, era un gran dibujante. Y por supuesto, su humor, a veces bastante negro, a veces algo pesado, pero un humor como ninguno que hoy en día, te haya gustado, te haya disgustado, jamás olvidarás y dejarás de extrañar.

  Hoy, mi amigo Tong estaría de cumpleaños, tendría veinte años.

  Hoy, amigo Tong, espero la estés pasando de manera épica, sentado en tu nube, dibujando mientras John Lennon, Kurt Cobain y Jimi Hendrix te tocan sus tonadas a centímetros de tu distancia.

  Feliz cumpleaños, Tong. 

 Te quiero campeón, sigue volando alto, permanece libre y mantente sonriendo.

  Dew.